Las garrapatas son parásitos chupadores de sangre que pueden adherirse tanto a animales como a personas. Una vez adheridas se alimentan vorazmente y mientras lo hacen, pueden transmitir una gran cantidad de enfermedades, como la erliquiosis canina, el tifus o la enfermedad de Lyme. Las garrapatas liberan toxinas que pueden dañar a sus huéspedes y sus principales víctimas suelen ser los perros. Así que proteger a su mascota de las garrapatas es una parte importante para la prevención de enfermedades ya que existen diversas patologías que pueden poner en riesgo a su mascota.

 

¿Qué enfermedades pueden transmitir?

Aquí hay solo algunas de las enfermedades que puede contraer un perro y/ un gato:

 

Erliquiosis canina

Esta enfermedad que transmiten las garrapatas que afecta a los perros es causada por una bacteria llamada Ehrlichia canis. Afecta al sistema inmunitario de los perros, produciendo cuadros de anemia y afecta a la médula ósea. Los síntomas, que aparecen menos de un mes después de la picadura, incluyen depresión, disminución del apetito, problemas respiratorios, rigidez, dolor en las articulaciones, fiebre, hemorragia nasal y hematomas.

 

La Anaplasmosis, la Babesiosis (piroplasmosis), la Fiebre maculosa de las Montañas Rocosas (RMSF)

 

Enfermedad de Lyme

La enfermedad de Lyme es causada por la bacteria Borrelia burgdorferi. Los signos comunes de la enfermedad de Lyme incluyen cojera, fiebre, inflamación de los ganglios linfáticos y las articulaciones y disminución del apetito. En casos graves, los animales pueden desarrollar enfermedades renales, cardíacas o trastornos del sistema nervioso.

 

¿Es peligroso el contagio a través de la picadura de garrapata?

En efecto, las enfermedades que se producen por el contagio mediante picadura de garrapatas son graves para nuestras mascotas, incluso mortales; exponiéndonos incluso a nosotros. El control de las garrapatas y otros parásitos externos e internos se realiza a través de la desparasitación.