
El gato sphynx o esfinge, es reconocido por no tener pelo, y aunque esto lo convierte muchas veces en la mascota favorita o ideal para los alérgicos, requiere de cuidados bastante significativos.
Al no tener pelo, es un animal muy vulnerable al frío y calor. Debes tener mucho cuidado con los cambios bruscos de temperatura, y siempre evitar que le lleguen directo los rayos del sol.
Su alimentación debe ser con un alto aporte calórico. Ojo con no sobrepasar la ración diaria, ya que podría engordar rápidamente.
Por su tipo de piel, no es extraño que se vuelve grasienta. Por lo tanto, será necesario bañarlo una vez a la semana en verano, y en invierno puedes reducirlo a una vez al mes.